Con un llamado a las misiones, el Rev. Clemente Vergara, Director Internacional del MMM. Inc., expuso bajo el libro de Isaías 6:8, un mensaje a escuchar la voz de las almas que gimen por misioneros. El evento en Trujillo cerró con broche de Gloria, pues el Espíritu de Dios transformó miles de historias. Cristo unió todo el norte del Perú.
Cuando hablo de la obra misionera, mi corazón salta de emoción. Dios ha dado un plan para evangelizar a este mundo, y con este plan, el trabajo puede ser cumplido. El problema es que mucha gente quiere cambiar a su gusto lo que Dios encomendó, pero no es así, nosotros tenemos que tener visión misionera.
Cuando la Palabra de Dios es proclamada y transmitida por un corazón sincero, el Espíritu lo guiará, pues el aspecto del Dios viviente se hará visible a través de esas vidas. Hay una necesidad de evangelizar el mundo, y para esto Dios quiere testigos; testigos en todas las naciones, pueblos y aldeas. Donde haya almas, ahí quiere Dios hombres y mujeres.
Pero para ser testigos, se necesita urgentemente la llama del Espíritu de Dios en las vidas. El fuego que cala y destruye toda impureza es quien obrará como fiel guiador, será el Cristo viviente glorificándose en aquellos seres. Cuando el Señor llama, una vida no puede estar quieta.
Por esta razón, mi hermano, hoy te digo que avances. Si sientes que estás estancado, ¡sal! ¡Huye! Busca la voluntad del Padre. ¡Ve! Observa el horizonte que Cristo te quiere enseñar. Enfócate en lo que Cristo tiene para ti. ¡Cristiano, avanza! En un mismo sentir y en una misma atmósfera de gloria, Trujillo se despide con cierre de gloria.
Mañana inicia la Convención Nacional en Lima. Estamos expectantes a lo que Cristo está haciendo. ¡El Cristo de la gloria está visitando el Perú, y tú no puedes faltar!