• 27 de Noviembre, 2023

Cierre de gloria: ¡Familias libres en Cristo!

En el último día de la Convención Nacional con sede en Iquitos, el Rev. Aris Solis, desde Colombia, fue el expositor del mensaje de Dios citando el libro de Romanos capítulo 1:20. Después del mover maravilloso del Espíritu Santo, y con cierre de gloria, el oriente del Perú se despide diciendo que para el que cree, todo es posible.

En el último día de la Convención Nacional con sede en Iquitos, el Rev. Aris Solis, desde Colombia, fue el expositor del mensaje de Dios citando el libro de Romanos capítulo 1:20. Después del mover maravilloso del Espíritu Santo, y con cierre de gloria, el oriente del Perú se despide diciendo que para el que cree, todo es posible.

El apóstol Pablo nos dice que podemos discernir la deidad de Dios a través de las cosas hechas por él. Esto significa que podemos encontrar en la naturaleza, observar el cielo, las estrellas, las montañas y los mares, podemos ver el ingenio y la precisión en cada detalle, lo que nos lleva a reconocer la sabiduría y el poder de Dios.

Nosotros, como seres humanos, estamos dotados de la capacidad de ver y entender la creación. Todo esto es una manifestación de la presencia de Dios en nuestras vidas y la oportunidad que tenemos de conocerlo. El versículo de Romanos 1:20, también nos recuerda que no podemos excusarnos de nuestra responsabilidad como seres humanos frente a la creación.

Desafortunadamente, nos damos cuenta de que el ser humano está siendo distorsionado, mostrando una completa falta de respeto hacia el Dios que la creó. Este versículo es un recordatorio que muestra la creación, dándonos la oportunidad de conocer a Dios más profundamente. Como cristianos, debemos ser responsables con nuestros hábitos y comportamiento, de tal manera que fomentemos el cuidado y el respeto por la naturaleza que nos rodea.

Por último, recordemos que la creación es un testimonio del poder y la deidad de Dios, y al mismo tiempo, es su regalo para nosotros. Es tiempo de proclamar a las naciones que es tiempo de volver a Cristo, alejarnos de la maldad y seguir a Cristo.

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