El Rev. Gerardo Martínez fue el portador de la poderosa palabra de Dios, ministrando a la grey reunida en la Convención Nacional en Lima, durante el cuarto servicio de fiesta espiritual.
Este camino cristiano se puede entender también como estar en una carrera, pero aquí se corre para ganar una corona incorruptible. Muchas veces el enemigo va a tratar de detener nuestro crecimiento espiritual, pero tenemos que recordar que el Señor siempre va a estar con nosotros.
Nosotros somos de los que perseveramos para salvación, no de los que retroceden. Ahora que somos libres por el poder libertador de Cristo Jesús, no podemos volver atrás porque el ser salvo es un regalo inmerecido que nos ha concedido el Señor en Su misericordia. Es importante avanzar con paciencia y perseverancia.
Dios quiere que nos despojemos de todo peso para poder correr sin estorbos; como, por ejemplo, el tener pensamientos negativos en el corazón, o cualquier otro tipo de pecado que con el tiempo empeorará. Todo esto nos impedirá seguir adelante; por esta razón, el salmista decía: “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno”.
Un pueblo que es libre por la sangre de Cristo, que es libre de toda contaminación, es un pueblo que avanza, que conquista. Mira a Jesús y avanza, porque Él es victorioso desde el principio y con su ayuda somos más que vencedores.