A raíz de los huaicos registrados tras las intensas lluvias y el ciclón Yaku que acabó con varias viviendas a nivel nacional, reportándose solo en Jicamarca, un promedio de 500 casas destruidas y más de 3.500 personas damnificadas. A este desastre se unieron organizaciones, incluyendo el Movimiento Misionero Mundial, brindando apoyo a los damnificados.
A raíz de los huaicos registrados tras las intensas lluvias y el ciclón Yaku que acabó con varias viviendas a nivel nacional, reportándose solo en Jicamarca, un promedio de 500 casas destruidas y más de 3.500 personas damnificadas. A este desastre se unieron organizaciones, incluyendo el Movimiento Misionero Mundial, brindando apoyo a los damnificados.
Decenas de hermanos y líderes del Movimiento Misionero Mundial, se unieron para brindar apoyo a los más afectados por el Huaico producto del ciclón Yaku, afectando primeramente el norte del Perú, y el centro chico de la capital limeña: Cieneguilla, Chosica, Santa Anita, Jicamarca, Chaclacayo, Lurin, entre otros.
Y pese al desalentador panorama, las diferentes iglesias del M.M.M. se hicieron presentes con víveres, alimentos, ropa y una mano amiga sacando el lodo de la carretera y viviendas para posteriormente compartir el mensaje de Salvación a cada localidad.