Padres, la responsabilidad de su generación recae sobre ustedes. Brinde amor y siembre el perdón para que cuando llegue la cosecha de sus años sean lágrimas de alegría las que salgan por sus ojos y no de hiel amarga por falta de dirección familiar.
Vivimos en una época de maldad progresiva dentro de los hogares. Los problemas familiares no son nada nuevo. En un mundo caído, en ocasiones nuestras familias, se convierten en los primeros "enemigos" debido a las peleas. La biblia no encubre el pecado, y registra una serie de problemas familiares, empezando con Adán cuando le echo la culpa a su esposa.
La rivalidad entre hermanos surge en las historias de Caín y Abel, Jacob y Esaú, y José y sus hermanos. Los celos entre las esposas, una de las consecuencias negativas de la poligamia, se encuentra en las historias de Ana, Lea y Raquel. Eli y Samuel trataron con hijos descarriados. Jonatán casi fue asesinado por su padre, Saúl. David fue quebrantado por la rebelión de su hijo Absalón. Oseas experimentó dificultades matrimoniales.
En cada uno de estos casos, las relaciones se dañaron por el pecado. Las discrepancias están en cada seno familiar, sin embargo, al trasladarnos al libro de Malaquías capítulo 4, enfatiza sobre la ira de Dios será como un horno ardiente para los malvados, pero será como la calidez sanadora del sol para aquellos que lo aman y lo obedecen. Dios espera la humillación de su pueblo para que Él obre en los corazones que albergan odio, rencor, pecados ocultos que no se pueden ver.
Todos tenemos fallas, sí, pero ello no quiere decir que nos encaminemos como si Cristo no estuviera en nuestros hogares. Todo creyente al tener una vida nueva, cuenta con la responsabilidad de adquirir una vida con transparencia, ética y temor de Dios. Estos valores no se pueden perder. Cuando adoptamos el espíritu de humildad y tratamos a los demás como Jesús los trataría, podemos resolver muchos de nuestros problemas familiares y de relaciones.
Padres, la responsabilidad de su generación recae sobre ustedes. Son sus vínculos familiares los que mañana más tarde reflejarán el tipo de ejemplo paternal que tuvieron. Brinde amor y siembre el perdón para que cuando llegue la cosecha de sus años viejos sean lágrimas de alegría las que salgan por sus ojos y no de hiel amarga por su falta de dirección familiar.
Hoy, dispón tu corazón para entender y humillarte delante del Señor y puedas exclamar que Tu casa le pertenece a Cristo. Dios quiere enviar paz a tu hogar y sanar las heridas del corazón. Como culto inaugural, en Rev. Humberto Henao, fue el expositor de la palabra del cielo citando el libro de Malaquías capítulo 4 en la Convención Nacional de Damas y Caballeros. Días de bendición, sanidad y salvación vivirá el norte del Perú.
Este evento tendrá una duración de tres días; inició hoy. Puedes seguir nuestra transmisión a través de nuestras distintas plataformas digitales de Bethel Televisión y MMM Trujillo. ¡No te lo pierdas!